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Allègre-les-Fumades, en el corazón de las Cevenas meridionales

Durante sus vacaciones en el Gard, aproveche para cuidar de su cuerpo. Le alegrará saber que Allègre-les-Fumades es una estación termal histórica ideal para hacerse una cura de salud y darse unos revitalizantes masajes.

Una estación termal histórica

 

Con solo 779 habitantes repartidos entre 7 aldeas, Allègre-les-Fumades atesora no pocos encantos. Para empezar, se trata de la única estación termal del Gard. El hidrógeno sulfurado de sus aguas les confiere propiedades medicinales reconocidas ya desde la época de los galos y los romanos. La leyenda cuenta que el mismísimo Julio César recaló en la localidad.
En el siglo XIX, el famoso doctor Louis Eugène Perrier fue gerente de esta estación antes de revenderla y adquirir el manantial de Les Bouillens, en Vergèze. Dicho manantial acabó tomando su nombre en 1906 a modo de homenaje.

A lo largo de la historia la estación de Fumade-les-Bains nunca ha dejado de estar operativa, ofreciendo en todo momento tratamientos, baños con aceites esenciales, masajes… En proceso de restauración desde 2020, ¡la estación volverá a abrir sus puertas en 2024!

Otros atractivos turísticos

 

Si está usted de paso en Allègre-les-Fumades, no deje de visitar los monumentos históricos de la zona:

  • Las ruinas del castillo de Allègre, con sus impresionantes vistas, declaradas Monumento Histórico desde 1997
  • El Arco romano situado en el corazón de la estación termal
  • La casa del Kronprinz, de estilo balneario
  • La capilla de Saint-Saturnin, antigua ermita sobre la colina de Allègre
  • La iglesia de Saint-Félix y su carillón de Boisson
  • O la capilla románica de Notre-Dame d’Arlende, en la aldea epónima