En cuanto llegue empezará el viaje. El comedor y la terraza con sombra en tonos terracota recuerdan Italia. Como si estuviera allá, junto al mar Tirreno.
Esta impresión es reforzada por la madera de los muebles, los manteles de cuadros rojos y blancos, las toallas verde renacentista... Cada detalle ha sido pensado para llevarle al otro lado de la frontera.
Y también el ambiente sigue las pautas de una trattoria. Pues se trata no solo de una experiencia gustativa sino también humana. Esto explica por qué el horno de pizzas se encuentra en el comedor: para garantizar esa proximidad. A través de su restaurante, el camping Les Cascades pretende transmitirle su pericia y pasión por la cocina italiana.